jueves, julio 12, 2007

Destino

Es curiosa la vida, a veces buscamos tanto los cambios, las nuevas oportunidades, los desafíos, algo que nos mueva y nos haga sentir que aún estamos vivos pero sin embargo por más que buscamos nada pasa y seguimos adormesidos en la misma rutina.

En otros momentos en cambio, sin proponérnoslo, sin siquiera buscarlo, las cosas simplemente se dan. Sin querer queriendo como dice el Chavito recibimos una llamada, un comentario, un aviso...y nos atrevemos, damos el salto y a diferencia de otras veces en las que el porrazo nos deja aturdidos, en esta ocasión caemos de pie y listos para iniciar una nueva aventura.

Y ahí me siento hoy, a las puertas de un nuevo cambio, dispuesta nuevamente a creerme el cuento, a empezar de cero...cuántas veces he vivido lo mismo, ya perdí la cuenta. Lo único cierto es que aún no me canso, aún no puedo resistir esa sensación de probar algo nuevo, de demostrarme a mi misma que soy capaz, que a lo mejor ésta es mi verdadera oportunidad.

Vengo de un año extremadamente complejo, extraño, intenso y sin embargo no puedo sentarme y esperar. No, yo no soy esa mujer. Yo tengo que seguir moviendome, tengo que seguir buscando, tengo que seguir creciendo...no puedo quedarme quieta, de verdad no puedo...toda la vida he sido igual, aunque los costos sean mas grandes que los beneficios, no puedo traicionar a mi naturaleza, de verdad no puedo.

Tantas veces he dejado todo por salir corriendo tras un sueño, por una simple ilusión. Tantas veces me he equivocado y tantas otras lo seguiré haciendo pero ni eso me detiene. A veces pienso que debiera calmarme, ser como el resto y esperar...esperar que las ganas de cambiar se calmen, que las cosas se caigan de maduras, pero no, dale con atraverse, con lanzarse a la piscina, aunque te ahogues en el intento.

Hoy sin embargo no tengo miedo de ahogarme, no tengo miedo de empezar de nuevo, no tengo miedo de estar sola, hoy solo quiero disfrutar este momento. Claro que me gustaría que estuvieras a mi lado y poder compartir contigo este sentimiento pero nunca las cosas son perfectas, eso lo he sabido de siempre. Solo espero que tal como hoy una parte de mi vida se arregla, algún día también se arregle la otra y por fin pueda olvidarme de ti.